Los ediles debatieron sobre las clases presenciales, en el marco del sistema de fases que rige en la provincia • La oposición buscaba una revisión a la Fase 2, pero el bloque oficialista no acompañó la solicitud • Carlos Mosso juró ante los presentes
El lunes por la noche se llevó a delante una nueva sesión ordinaria en el Concejo Deliberante de la ciudad, donde los representantes locales trabajaron varios expedientes relacionados a obras y educación.
Dentro del orden del día, el debate entre los concejales surgió ante la presentación del bloque de juntos por el Cambio donde se solicitaba al gobernador de la provincia Axel Kicilloff que se revea la posibilidad de contar con clases presenciales en los distritos bonaerenses que se encuentran en Fase 2 considerados de “alto riesgo epidemiológico”.
En este sentido, la edil Claudia Fraile (JxC) manifestó que “este proyecto viene en línea con la importancia de que tenesmos que trabajar en consenso sobre el rol fundamental de la educación en este contexto de pandemia”. Asimismo, recalcó que en Mercedes se retomaron las clases en las aulas, pero esta situación estaba solamente ligada al cambio de fase producido horas antes de dicha sesión, por lo cual desde su bloque se proponía a “seguir pensando, dado que lo establecido fue realizado en el 2020 y en este 2021 la realidad ha cambiado” haciendo referencia a la situación por la que atravesaron los distritos en Fase 2 durante el último mes. En tanto, Fraile agregó que “desde el 2020 donde no hubo clases presenciales se causó un gran daño a la educación, con una gestión de la pandemia que era desconocida para todos, lo cual implicaba tomar medidas restrictivas, este 2021 nos encontraba con una situación mejor, de trabajar con burbujas como se hizo a principio de este año. Si bien es verdad que la alarma epidemiológica no se permite la presencialidad, es contradictorio que se restrinjan las clases dado que está comprobado que en nuestra ciudad no se han dado contagios dentro de las escuelas” por lo que se solicitaba al gobernador que revea las restricciones establecidas.
Por su parte, desde la bancada oficialista, el que salió a responder los dichos de la concejal Fraile fue Julián Insaugarat, quien resaltó la importancia y el trabajo tanto del sistema de salud como de los docentes. En tanto agradeció a “la sociedad que se solidarizó con todas las medidas que se tomaron en Fase 2. Hoy podemos volver a la Fase 3 con presencialidad gracias a ello”. Luego resaltó “que manifestamos una preocupación ante la educación cuando en el pasado no se pensó con la mismas importancia cuando se cerraron escuelas, o cuando muchos docentes se quedaron sin horas”. Como parte del mismo frente, el concejal Carlos Garro manifestó que las posibilidades de modificación en las gestiones de la pandemia, escapaban a la labor de los concejales mercedinos, y que las mismas tendrían que recaer en las cámaras que están llevando adelante los debates para implementar la ley que se busca sacar adelante en el congreso.
Con respecto a la postura del partido Fe, la representante Sabrina Viñales sostuvo que “estas son propuestas que rozan la demagogia, que no tienen ningún tipo de fundamento científico. Quiero dejar en claro que las puertas de las escuelas no están cerradas, que los docentes vienen haciendo un trabajo inmenso, se comunican, buscando que los chicos puedan acceder a los estudios”.
Finalmente, tras el pedido del Frente de Todos, el expediente fue archivado, gracias al acompañamiento del voto de Viñales, sumado al doble voto de la presidencia que impuso la mayoría.
Juró Carlos Mosso
Luego de que el concejal José María “Sesón” Comesaña solicitara la licencia en el cuerpo deliberativo local, su reemplazante Carlos Mosso quien integraba la lista del 2019 tomó su habitual juramento en la sesión del lunes.
Iniciando el encuentro en el recinto con la mayoría de los concejales presentes, el nuevo concejal de Juntos por el Cambio se acercó al estrado del presidente y presentó su juramento ante Dios y la Patria.
Desde ahora, el concejal estará en la banca opositora, en principio, por los seis meses de licencia que solicitó el doctor Comesaña hace un mes atrás.
